La combinación de sus harinas y su tratamiento hace que tengamos un pan 100% integral y con una textura excepcional. El escaldado de la harina de centeno hace que la masa se vuelva más viscosa, elástica y con mejor consistencia. Combinado con la harina de cebada integral mejora aún más su textura gracias a su fibra soluble por su componente en β-glucanos.
Como todas las harinas de este pan son integrales, mantienen los beneficios del grano entero (endospermo, salvado y germen) como son fibras, vitaminas del grupo B, minerales, antioxidantes, vitamina E y grasas insaturadas. Ideal para controlar el colesterol y los niveles de glucosa en sangre.